Este sábado, la
selección albiceleste jugará ante Bélgica pensando en las semifinales de la
Copa del Mundo, instancia que no cruza desde Italia 1990. Messi es el mejor
hombre, pero enfrente tendrá un dispositivo defensivo difícil de traspasar.
Bélgica cree poder parar al “diez” aunque viene de sufrir ante Estados Unidos.
-Argentina: La
selección albiceleste está disputando otro Mundial sin un proyecto plasmado en
su juego, carente de un plan estratégico e improvisando según lo que decidan
las “estrellas. Luego de cuatro triunfos agónicos, Argentina está en cuartos de
final, habiendo ganado por la mínima diferencia en todos los encuentros.
Sabella, quien arribó a Brasil con muchas dudas tácticas, plasmó un dibujo táctico que no ofrece seguridad ni contundencia. Esto quedó demostrado en los últimos compromisos, ante Nigeria y Suiza, el medio campo es prácticamente inexistente, producto de la soledad en que se encuentra Mascherano para la recuperación de la pelota. Es justamente allí donde Argentina sufre y carece de elementos para diagramar una mejor estrategia. Mientras todas las selecciones poderosas se arman desde la mitad de cancha, el conjunto sudamericano descubre sus debilidades en ese sector clave. Un breve repaso indica que si no fuera por Romero y por Lio Messi, Argentina sería un equipo más del montón. No hay dinámica, a pesar del predominio. Ante los suizos se mejoró bastante, pero la estrategia no prosperó por la falta de movilidad de sus futbolistas, quienes permanecen estáticos y carecen de ideas para modificar esta tendencia. El equipo de Sabella no ofrece muchas alternativas tácticas y, al igual que Brasil, trasladan demasiado el balón hasta que Messi brille con alguna jugada salvadora. Por último, en ataque, genera por el peso específico y el talento de Di María y Messi, pero el resto de los delanteros no entran en contacto con la pelota. Además, cuando juega de contragolpe ofrece mejores situaciones de peligro.
-Resultados: Bosnia
2-1, Irán 1-0, Nigeria 3-2, Suiza 1-0.
-Esquema: 4-2-4 (todos
dicen 4-3-3).
-Estrategia: tenencia
del balón, trasladándolo al campo rival para generar situaciones desde el
dominio.
-Ataque: presiona hacia
el área rival, aunque lateralizando el juego, sumando gente cerca del arco
contrario y buscando alguna salida mágica de Messi o Di María.
-Defensa: endeble,
carece de experiencia y solidez. Como equipo defiende mal, no lo hace
escalonadamente y sufre demasiado los contragolpes. El retroceso es fatal para
los zagueros.
-Juego Colectivo: la
dependencia a las individualidades convierten a la selección en un puñado de
estrellas desparramadas en la cancha.
-Individualidades:
Messi es casi todo lo que genera, secundado por Di María y apoyado por
Mascherano, Rojo y Romero en la defensiva.
-Velocidad: el equipo
es lento, solo acelera con Messi y Mi María. No hay rapidez para hacer rodar el
balón y jugar a un toque.
-Físico: no se impone
con fiereza ni tiene aptitudes en este rubro. Algunos futbolistas llegaron con
pocos partidos encima por las lesiones.
-Bélgica se formó con
una base de jugadores que brillan en sus clubes. Sin embargo, la dinámica del
mediocampo que diera cátedra en Europa permanece adormecida. Es cierto que
arribaron a Brasil con algunos lesionados y ausentes (Benteke) y Lukaku tuvo
que asumir el rol de único hombre de área. La clave es el mediocampo porque sus
jugadores no ocupan posiciones fijas y rotan constantemente en búsqueda de
espacios, aunque aún no logran imponerse en la ofensiva. En su debut ante
Argelia, comenzó perdiendo y supieron dar vuelta el resultado cuando ingresó
Fellaini, pero en los posteriores partidos el jugador no lució. Cuando los
“diablos rojos” atacan verticalmente prosperan las proyecciones de sus
laterales y si logran espacios, aprovechan la velocidad de Hazard y Mirallas,
como sucedió ante Estados Unidos. Suelen utilizar dos esquemas, el 4-1-4-1 o el
4-2-3-1 y lo mejor que hasta ahora demostraron fue la solidez defensiva.
-Resultados: Argelia
2-1, Rusia 1-0, Corea 1-0, EE. UU. 2-1.
-Esquema: 4-1-4-1 o en
su defecto 4-2-3-1.
-Estrategia: juego de
posesión y rotación, busca el desgaste del rival, pero saber entregar el balón
para salir de contra cuando el contrario es superior.
-Ataque: manejan bien
la pelota pero le cuesta encontrar espacios, así aprovecha a Origi cuando juega
para ir por el centro, presionando. De lo contrario, intenta por la derecha.
-Defensa: sólido, se
abroquela escalonadamente atrás para no sufrir. Cuenta con cuatro marcadores
centrales y un volante medio para obstaculizar al arquero.
-Juego Colectivo:
asociado, aunque aún no floreció. Se esperaba mucho de Bélgica en este sentido.
La juventud de muchos hace que falte un líder.
-Individualidades:
Hazard es el mejor hombre de ataque, Origi desde el banco le cambió la cara por
rapidez y lucidez. Courtois es un gran arquero y Witsel imprime orden en la
mitad.
-Velocidad: cuando
contragolpea es más veloz que cualquier rival porque hacen girar la pelota en
lugar de trasladarla. Sin embargo, se mostró lento el equipo a la hora de
pararse en campo contrario.
-Físico: buen desempeño
y holgura física hasta los 90 minutos. En defensa son robustos y difíciles de
perder el mano a mano.